martes, 16 de agosto de 2011

Crónica del Primer Curso de Verano (parte 8)

Clases de Estadísitica Descriptiva
con ADRIÁN GARDUÑO

¿Qué tiene que ver la relación con tu padre
con tu gusto por las matemáticas?

El primer día de clase, tuvimos que hacer una biografía de nuestros respectivos padres. Antes respondimos algunas preguntas cruciales: ¿quién es o quién fue mi padre, que cambiaría o qué hubiera cambiado de él, qué es lo que no me hubiera gustado vivir con él y qué consecuencias ha tenido en mi vida?

Después podías asombrarte por la similitud que la relación con tu padre ha tendio con tu relación hacia las materias que tienen que ver con números y matemáticas en tu vida.

¿Por qué? Porque las matemáticas tienen que ver con las cosas que tradicionalmente enseña la enrgía masculina o la figura del padre: orden, valores, límites, identidad, ubicación, elección de variables, etc. En contraste con lo que suele enseñar la energía femeninda de la madre: cuidado, nutrición, comunicación, espiritualidad, etc.


Entonces, para reconciliarte con las matemáticas, primero hay que reconciliarse con el padre, no sólo con el padre físico, sino con las figuras paternas ancestrales. En el caso de los mexicanos, que descendemos de una mezcla de madres indígenas y padres españoles, es importante hacer las paces con esta herencia genética.

Después de esto sí ya entramos directamente y con gusto en las definiciones, conceptos y los ejercicios básicos de la estadística. Y terminamos las clases diseñando un proyecto para medir la desviación estándar en una observación o experimento que tenga que ver con nuestros intereses personales o profesionales.


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